El viernes 29 de noviembre hemos concluido el curso-taller teatro cósmico, ha sido fenomenal, el grupo de participante se ha transformado desde lo profundo de su ser, con mas capacidad para fluir con su cuerpo y emociones, en una energía renovada, surgiendo espontáneamente la actuación, la acción, siguiendo el ejemplo planetario, cósmico, estelar. El cielo nunca deja de mover sus hilos invisibles para continuar tejiendo la trama de la vida de la cual somos parte. En la última sesión nos presentamos ante el público que convoca el Centro de Estudios de la Red Gfu en Concepción. Tengo el deseo de poder compartir alguna vez estas experiencias generadas en el laboratorio del grupo de yamines.
Bueno, en nuestra última publicación los he dejado con una tarea, investigando dentro de cada uno de ustedes a la Luna. Aquí les comparto algunas características de nuestro personaje planteado.
El símbolo de la Luna esta conformado por dos semicírculos, uno de radio mayor que contiene al de radio menor, esto ya es muy elocuente. Simbólicamente el semicírculo representa el alma. Según el V.S.A Maestro José Marcelli el alma “es el conjunto de experiencias acumuladas por el individuo”. La Luna representa el alma universal (semicírculo de mayor radio) conteniendo al alma individual (semicírculo de radio menor). El símbolo no puede ser mas nítido.
La Luna representa la acumulación de nuestros recuerdos, de nuestro pasado, la influencia lunar nos hace reaccionar instintivamente de acuerdo a estas experiencias acumuladas “sin saber porque reaccionamos de ese modo”, la Luna como luminaria nocturna se asocia pues al tiempo de oscuridad, al sueño, al subconsciente del individuo. si el Sol representa la verticalidad, la luna será la horizontalidad, entendiendo este concepto como la receptividad, la feminidad. Así como el semicírculo mayor cobija al menor, así el alma universal cobija a la individual, así también la madre, representando la expresion del alma mayor cobija a su bebé, hija-hijo, protegiéndolo, siendo la Luna la expresión nítida de la mujer en función de maternidad. sabemos que la Luna mueve las aguas de nuestro planeta, así también mueve nuestras “aguas”, nuestros fluidos corporales (linfa, sangre, lágrimas, etc), incidiendo entonces enormemente en los cambios en los estados de ánimo. Así, las personas que tienen en su carta natal una luna demasiado sensibilizada por su ubicación en signo, casa y aspectos …(no se preocupe, mas adelante hablaremos de estos conceptos) tendrá variaciones muy extremas en la expresión de sus emociones. En los dichos populares son aquellas personas que llamamos “lunáticas”.
A través de las preguntas que le hice anteriormente ud. puede ir haciéndose una idea de cómo actúa este personaje dentro suyo. Todos tenemos en nuestro interior una imagen materna, algunos mas evidente, otros menos, entonces ahora se puede preguntar ¿cómo es mi relación con la figura materna?, ¿cómo lo ha sido con la madre real y concreta que he tenido en esta existencia?, ¿cómo es mi relación con la mujer en general?
La próxima publicación será dedicada a otro de nuestros personajes: Mercurio.
Comparte Tu Opinión Sobre Este Articulo